En el mundo de la tecnología existe una brecha histórica entre la cantidad de hombres y mujeres que trabajan en el sector. Una estimación de la UNESCO indica que las mujeres solo constituyen el 17,5% de la fuerza laboral mundial en campos relacionados con la tecnología, mientras que alrededor del 30% elige los campos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) como materias principales para estudiar.
Según la consultora Deloitte, las grandes empresas tecnológicas globales, en promedio, alcanzarán casi el 33% de representación femenina en su fuerza laboral a fines de 2022, y esto es un aumento de 2 puntos porcentuales más que en 2019. Por su parte, la proporción de mujeres en puestos técnicos también aumentará (25% en 2002, contra 22,4% en 2019), aunque “ha tendido a estar por debajo de la proporción general de mujeres en alrededor de 8 puntos porcentuales”.
Por ejemplo, en la Argentina el 60% de las estudiantes universitarias son mujeres; pero en las carreras de ciencias aplicadas e ingeniería ellas apenas representan el 25%; y dentro del total de inscriptos en carreras de programación, solo el 15%.
Prejuicios y desinformación
¿Por qué hay tanta diferencia entre el porcentaje de mujeres y hombres que estudian y trabajan en carreras de tecnología? Las causas pueden ser varias:
- Hay un factor cultural que absurdamente sigue operando. En tal sentido hay ciertos estereotipos falsos que indican que “hay carreras de hombres y mujeres”.
- La educación secundaria no suele asignar demasiado espacio a las materias de tecnología, especialmente a la práctica, y esto impide que más mujeres puedan entusiasmarse con estos roles.
- No existe suficiente visibilización sobre las referentes mujeres en este campo, cuando la realidad es que las profesionales jugaron un papel clave en el avance de la tecnología y la informática desde su creación. Y en cambio sí se machaca todo el tiempo con los varones exitosos en este rubro.
Como se ve, distintos prejuicios y bastante desinformación impiden que más mujeres se vuelquen a estudiar y desarrollar este tipo de profesiones (como Programación, Cloud Administration, Seguridad Informática y Redes Informáticas). Y esto es ilógico en estos tiempos en que estas carreras se pueden estudiar online y en que estos roles ofrecen excelentes salarios y tienen una gran demanda.
El cambio necesario
En este campo hay que hacer un importante trabajo de cambio cultural, ya que además del porcentaje de participación menor de las mujeres, también persiste la desigualdad en el salario y las oportunidades.
Promover la diversidad de género en la tecnología es clave en una industria que abre campos laborales muy interesantes. Además, los estudios demuestran que los equipos diversos (por género, raza, edad y otros factores sociales) se desempeñan mejor y son más innovadores.
Si sos mujer y querés incluirte en el atractivo mundo de la tecnología, en Teclab podés estudiar y formarte en carreras cortas con título oficial a distancia, como la Tecnicatura Superior en Seguridad Informática, la Tecnicatura Superior en Redes Informáticas a distancia, la tecnicatura en Programación o en Cloud Administration.