Si te fascina la tecnología orientada a empresas y te querés formar como técnico en redes seguramente querrás conocer qué tendencias están cobrando fuerza este año. Al respecto podemos decir que las redes de área extensa definidas por software (o SD-WAN) siguen ganando bastante protagonismo. Y también se observan algunos avances con las tecnologías inalámbricas 5G y Wi-Fi 6.
Al ritmo con el que avanza el trabajo híbrido, que tiene que ver con la combinación de dáis de trabajo en la oficina con jornadas en casa, la tecnología SD-WAN se volvió mucho más crítica. A medida que los bordes de las redes corporativas se extendieron hacia los hogares de los empleados, los dispositivos SD-WAN fueron ganando importancia, ya que brindan mejor experiencia y seguridad para la fuerza laboral remota. Además esta tecnología de red ofrece una mayor flexibilidad para las empresas que los sistemas WAN anteriores. Por ello hay analistas que ya pronostican que SD-WAN se convertirá en la norma.
Al igual que una red WAN tradicional, SD-WAN permite que las empresas que tienen muchas sedes le ofrezcan a sus empleados acceso a datos, archivos y aplicaciones en su casa, a través de la conmutación de etiquetas multiprotocolo (MPLS); pero además agrega aplicaciones basadas en la nube, lo que permite que el personal acceda de forma remota a programas de toda la empresa. Por ello se pronostica que en 2027 el mercado de redes definidas por software alcanzará más de U$S 43 mil millones en todo el mundo.
De todas formas las redes privadas virtuales (VPN), que hasta aquí eran la solución punto a punto más utilizada para los trabajadores remotos, continuarán teniendo una importante incidencia, ya que extienden de forma segura las redes privadas a través de las redes públicas y permiten a los usuarios compartir datos a través de esas redes. De hecho se espera que el mercado mundial de VPN supere los U$S 75 mil millones en 2027.
Redes inalámbricas
Por el lado de las nuevas generaciones de tecnología inalámbrica, si bien varios operadores están implementando 5G, muchas empresas que tenían planes de migrar aún los están postergando. Sin embargo, esta tecnología de quinta generación se está afianzando y todo indica que continuará creciendo en 2022 y más allá. Por ejemplo a nivel hogareño se están incorporando redes inalámbricas fijas 5G para segmentar los sistemas de trabajo de los domésticos. También se espera ver un crecimiento en las redes privadas 5G LTE, que es cada vez más una opción para los operadores que buscan facilitar el desarrollo de Internet de las Cosas (IoT) mientras mantienen la privacidad, seguridad y beneficios económicos a largo plazo.
Mientras tanto, Wi-Fi 6 está creciendo entre los trabajadores remotos, ya que las demandas de un mayor ancho de banda pueden justificar más fácilmente el precio levemente superior de pasar a la nueva tecnología.
Nube, borde y otras tendencias
Además de los avances en la automatización de redes, otra tendencia es la habilitación de la inteligencia artificial (IA) de los productos de red. Estos desarrollos se están enfocando en la habilitación de aplicaciones con IA en las áreas de seguridad y análisis.
Por otra parte la migración a la nube es un proceso que continúa escalando. La novedad es que en paralelo (y como un proceso complementario) también se observan avances en las arquitecturas de borde, que empiezan a personalizarse. Hoy los dispositivos IoT ya generan enormes cantidades de datos fuera de los centros de datos centralizados, y para gestionar esos datos las empresas necesitan cada vez más la baja latencia y el procesamiento confiable de la informática perimetral.
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